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¿El gobierno federal prohibirá alguna vez los sorteos en EE. UU.?
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Si sigues el auge de los casinos con sorteos en EE. UU., seguro notaste que la presión aumenta con mucha rapidez. De costa a costa, los legisladores y las autoridades reguladoras encienden las alarmas con el objetivo de prohibir estas plataformas.
La presión es muy alta en cierto estados, como es el caso de Nueva York, donde cobra fuerza un proyecto para prohibir los casinos con sorteos en línea. En todo el país, el marco legal que rodea a estos sitios es, en el mejor de los casos, confuso. Si bien los casinos con sorteos operan en virtud de las leyes federales de sorteos, la forma en que cada estado interpreta y aplica estas leyes varía considerablemente. Esta inconsistencia ha aumentado las críticas y disparó una rápida respuesta.
Desde la Asociación Estadounidense del Juego (American Gaming Association, AGA) han expresado abiertamente sus preocupaciones; afirman que estas plataformas operan entre el límite de lo legal y lo ilegal, y que se aprovechan de leyes obsoletas y operan sin la supervisión de operadores regulados de iGaming o de apuestas deportivas. Los legisladores ya han iniciado el proceso para prohibirlas por completo en lugares como Michigan y Washington.
Los estados refuerzan los controles sobre las regulaciones
Otros estados están intensificando las normas. El comité del Senado elevó la ley SB5935 en Nueva York. Esta ley podría prohibir completamente los casinos con sorteo en línea e imponer fuertes sanciones a quienes no la cumplan, con suman que van de 10.000 $ a 100.000 $ (de 9.300 € a 933.000 €).
Mientras tanto, Mississippi, Maryland y Virginia Occidental están considerando medidas similares, o bien ya las han implementado. En Idaho, los casinos con sorteos no están prohibidos, pero los premios en efectivo sí, lo que limita su atractivo.
Estas medidas regulatorias ya están teniendo repercusiones. Uno de los principales actores de la industria, High 5 Casino, anunció que cierra sus operaciones en Nueva York en abril de 2025, lo que demuestra la gravedad de este cambio.
El cerco legal se cierra cada vez más y surge una gran pregunta: ¿La prohibición de los casinos con sorteos es una medida justa? ¿O podría ser contraproducente? Para analizar esta cuestión en detalle, hablamos con Bob Stoddard, socio principal del área fiscal de la división de Juegos de Azar de KPMG de EE. UU., quien ofreció información exclusiva sobre el aumento de los controles y lo que podría significar para el futuro de las apuestas digitales en Estados Unidos.
Medidas más severas para los sorteos: la opinión de los expertos
SiGMA: Las solicitudes de prohibición de los casinos con sorteos está ganando terreno en estados como Nueva York y Arkansas. ¿Qué opinas sobre este tema? ¿Cómo podría afectar a la industria en términos de ingresos?
Bob Stoddard: “Creo que muchos coincidirían en que si los sorteos se enfrentan a prohibiciones más amplias en mercados densamente poblados, eso probablemente tendría un efecto adverso significativo en los ingresos generados por los operadores de sorteos. Por esa razón, muchos están observando activamente los acontecimientos en curso en los estados con mayor población, donde se sabe que los órganos reguladores o los legisladores revisan el modelo de sorteos”.
Bob también señaló que el debate actual sobre los sorteos ya se dio anteriormente, pero con los deportes de fantasía, que afrontaron batallas legales durante su fase inicial.
“Muchos de los argumentos clave y gran parte del debate suenan bastante similares a lo que la industria vio durante los inicios de las ofertas de deportes de fantasía, como anuncios similares del fiscal general, órdenes de cese y desistimiento, acciones legales, etc. Con eso en mente, uno no puede evitar preguntarse si finalmente llegaremos a un resultado similar para los sorteos”, agregó.
SiGMA: En términos regulatorios, se suele afirmar que los casinos en línea son más seguros que los casinos con sorteos. ¿Es esto realmente así o solo una exageración?
Bob Stoddard: “Quienes están a favor de los sorteos señalan sus procesos KYC (conoce a tu cliente) y AML (leyes contra el lavado de dinero), el trabajo con proveedores de pago conocidos, quienes también están a favor de la industria regulada, los cambios recientes en las restricciones de edad, el uso de contenido de juego certificado, términos de uso más claros y transparentes, etc., junto con lo que parece ser una demanda de mercado clara y significativa del iGaming en EE. UU. basada en los ingresos generados por las plataformas de juegos sociales y de sorteos, incluidos los estados que ya han regulado el iGaming (por ejemplo, Pensilvania)”, agregó.
Sin embargo, reconoce que no todos lo ven de esa forma.
“Por el contrario, muchas partes interesadas en la industria del juego regulado consideran que los sorteos no son, en esencia, diferentes a un operador de iGaming ilegal que utiliza un modelo de moneda creativo y un argumento legal novedoso con le objetivo de encajar en varias leyes de sorteos estatales, que son antiguas y no fueron diseñadas para los escenarios legales que enfrentamos hoy”, agregó.
SiGMA: La ludopatía es una de las principales razones que impulsan la prohibición de los sorteos. ¿Es realmente la prohibición una solución?
Bob Stoddard: “El debate sobre la prohibición de los sorteos plantea interrogantes sobre la eficacia de las medidas de juego responsable para abordar inquietudes más amplias dentro del sector. Legalizar las apuestas deportivas en línea (OSB) y el iGaming con requisitos cada vez más estrictos podría generar más tensión entre los clientes y provocar que opten por opciones no reguladas o el mercado ilegal, sin las garantías adecuadas o sin cumplir plenamente con las regulaciones y protecciones equivalentes a las que están sujetos los operadores regulados”, agregó.
Advirtió que las regulaciones bien intencionadas, a veces, pueden producir resultados no deseados.
“Los organismos reguladores del juego se enfrentan al desafío constante de equilibrar simultáneamente las inquietudes legítimas sobre la protección de los jugadores, responsabilizar a los operadores regulados por las fallas en el juego responsable e intentar cerrar a los operadores ilegales, pero también pueden, inadvertidamente, facilitar que los consumidores recurran a productos del mercado gris y negro, debido a su mayor accesibilidad y menor complejidad de uso”, agregó.
Musk, Bally’s y Trump: la conexión en los sorteos
En medio de todos los llamados a tomar medidas drásticas contra los casinos de sorteos, hay un aspecto más que no se puede ignorar. Si bien muchos presionan por una regulación más estricta, o incluso una prohibición nacional, la probabilidad de una medida federal de prohibición total parece remota. ¿El motivo principal? Según algunos medios, el propio presidente Donald Trump podría beneficiarse significativamente de las empresas de casinos con sorteos.
Actualmente, está surgiendo una guerra de ofertas de alto riesgo sobre quién obtendrá luz verde para construir un nuevo casino en la ciudad de Nueva York, y podría terminar con Trump llevándose una ganancia inesperada de 115 millones de dólares.
Bally’s Corp., uno de los candidatos, tiene en la mira un campo de golf propiedad de la ciudad en el Bronx, que solía ser operado por una empresa de Trump.
En 2023, Bally’s pagó a Trump 60 millones de dólares (58,2 millones de euros) por los derechos de administración del campo de golf pública de 18 hoyos, ubicada a lo largo de la costa del Bronx, donde el río Este se encuentra con el estrecho de Long Island. Como parte del cambio de imagen, se eliminó el imponente letrero que decía “Trump Links” y el recinto pasó a llamarse Bally’s Golf Links at Ferry Point.
Sin embargo, aquí está el truco: una cláusula poco conocida en el acuerdo revela que si Bally’s obtiene una de las tres codiciadas licencias de casino del estado, Trump podría recibir otros 115 millones de dólares (101,5 millones de euros).
Y eso no es todo: Elon Musk, aliado de Trump, también demostró su interés por los casinos con sorteos. Durante la campaña electoral de 2024, Musk acaparó titulares tras sortear un premio mayor a un millón de dólares (880 millones de euros), lo que puede interpretarse como un reconocimiento público al atractivo de la industria.
A medida que aumenta la presión regulatoria, la interacción de intereses políticos y financieros en los niveles más altos complica la situación. El futuro de los casinos con sorteos en EE. UU. sigue siendo incierto. Una cosa es clara: el debate sobre los casinos con sorteos seguirá vigente durante un tiempo.
